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Escrito por Gabriel Lira y actualizado por Julia Muñoz .
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01 de diciembre 2025
Un ícono en la industria tuerca y también en nuestro país. El Volkswagen Escarabajo, el Mini Cooper, el clásico “huevito” BMW o el Fiat 147, fueron hatchback o autos pequeños más que emblemáticos en la segunda mitad del siglo XX.
Al igual que el Escarabajo, la Citroneta, conocida formalmente como Citroën 2CV, era un símbolo de economía en la mantención, sencillez mecánica, revolución y libertad.
Si bien se comenzó a desarrollar en los años 30, fue en 1948 que comenzó a popularizarse, como un bólido accesible y para la familia… por esa época, salvo el "huevito", todos estos bólidos eran considerados sedán, de uso juvenil, pero también familiar.
Poco a poco, la Citroneta o Citroën 2CV, se fue volviendo un clásico hasta el cese de su producción en los años 80, dejándole el cetro de los, ya denominados hatchbacks, al Citroën C3.
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El clásico de Citroën, comenzó su fabricación en Francia, pero en los 60 también se fabricó en Argentina y después en Uruguay y hasta en el norte de Chile, específicamente en Arica.
Su clásico motor de 2 cilindros, comenzó con 375 centímetros cúbicos (cc) y enfriado por aire, como muchas motos. Sí, porque tenía apenas 9 caballos de fuerza, pero apenas llegaba a los 50 km/h con sus más de 500 kilos.
Dicha cilindrada la tiene una CB350 hoy en día, pero que tiene más de 20 HP. La potencia de una Citroneta, hoy, la tiene una Honda CB125.
Con el pasar de los años, su cilindrada se acercó a los 500 cc, pero alcanzando los 26 HP a fines de los 70, cuando apareció la Citroneta Sahara, de la que te hablaremos. En casi toda su historia, predominó la tracción delantera y una transmisión manual con 4 cambios.
Aun así, hay registros de Citronetas completamente estándar andando en el barro.
Esos son jeepeos particulares, que podría haber hecho cualquiera de nosotros, pero hubo algunos hitos más emblemáticos, rodando por todo el mundo en competencias del más puro espíritu off-road.
Incluso, como te adelantamos recién, llegó a existir un Citroën 2CV con tracción a las 4 ruedas: se llamaba Citroën 2CV 4x4 Sahara. Se lanzó en el año 58, pero a diferencia de los típicos vehículos con doble tracción, la Citroneta Sahara, tenía 2 motores, uno en cada eje.
De esta manera, la tracción no estaba dada por la transmisión, sino por sus motores, donde se podía usar solo el de adelante, solo el de atrás o ambos. Este era el modelo de Citroneta que superaba los 25 HP.
Una de sus carreras más recordadas por los fanáticos del modelo, fue el Raid Paris-Kaboul-Paris, que recorrió más de 15.000 kilómetros en los 70 y otros miles de kilómetros más en rallys entre Europa y África. Todas estas pruebas, de hecho, las organizaba la propia marca francesa.
Fue en 1957 donde se inició la historia de la mítica Citroneta en Chile. Ese año, el modelo francés comenzó a ensamblarse en la fábrica de Arica y donde adquirió el nombre de Citroneta.
El apodo viene de la mezcla de Citroën y camioneta. Sí, porque en el norte de nuestro país, se ensamblaba la versión pick-up, que fue uno de los tantos formatos que tuvo el 2CV.
Desde ese momento, la Citroneta se volvió un símbolo de la clase trabajadora y campesina en Chile. Además, los modelos de 2 y 4 puertas se popularizaban entre los más jóvenes y las familias.
Pese al éxito en todo Chile del modelo, en 1979 la Citroneta dejó de ensamblarse y en 1983 se dejó de importar… llegaban los vehículos japoneses, de baja cilindrada, pero mucho más rápidos, cómodos y eficientes que la propia Citroneta o el Escarabajo.
Además, la Citroneta perdió más terreno con la consolidación de otro mítico y francés, el Renault 5, el cual en los años 80 ya ofrecía motorización turbo y más de 150 HP… otra cosa. Sin embargo, todavía hay fanáticos de la mítica Citroneta en Chile y el mundo.
Se dice que en 2028, Citroën va a lanzar al mercado una renovada versión 100% eléctrica de la Citroneta. Eso sí, uno de los objetivos de la marca gala, es que la mantención del vehículo sea de bajo costo, pensando en conservar algo de la esencia del Citroën 2CV… “libertad, economía y sencillez”.
Esto ya tiene cerca de 20 años diciéndose, puesto que en el Salón del Automóvil de Frankfurt, Alemania, en 2009, la marca presentó una versión prototipo híbrida enchufable (PHEV) de la Citroneta.
Fuente imagen: La Tercera
El año 2028 será el 80.º aniversario del modelo y se espera que Citroën lo celebre a lo grande con el lanzamiento de la Citroneta eléctrica. De ocurrir esto, el Citroën 2 CV se uniría a otros compactos y clásicos europeos que ya tienen su versión eléctrica, como el Fiat 500, el Renault 5 o el Beetle.
El primero de ellos, Fiat, lo ofrece en Chile hace algunos años, el Renault 5 no ha llegado a Chile, ni tampoco tiene previsión de hacerlo por el momento, mientras que el Beetle y también la Citroneta, por ahora solo han tenido prototipos y aproximaciones.
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