Cuando andamos en busca de un auto usado hay 3 lugares donde puedes buscar, uno es en concesionarias y locales de compraventa de usados y seminuevos; otros autos los puedes encontrar en un remate y sino comprarle a alguna persona que venda su auto, ya sea porque necesita la plata o porque quiere renovar su vehículo.
En este último caso, es el único de los lugares donde tendrás la posibilidad de regatear el precio del auto, de ahí que en muchas publicaciones verás la frase “precio conversable”. Eso quiere decir, que el vendedor está dispuesto a bajarse un poco en el precio del vehículo.
Por si no lo sabías, en los remates no existe un regateo, sino una competencia por quién paga más por un vehículo o cualquier otro bien. En los locales de compraventa, el precio podría estar fijado por un dueño, ajeno al local, quien difícilmente bajará su precio considerando que el lugar de compraventa cobra una comisión por la venta hecha.
En este escenario y como dijimos, donde sí hay posibilidades reales y directas de regatear o negociar el precio de un auto usado es directamente tratando con su dueño de forma particular.
Lo importante es saber y sentir cuándo y cómo negociar el precio de un auto usado. Para ello es importante estar empoderado con mucha información, de tal manera de tener herramientas para poder valorar el auto y saber si puedes negociar un descuento en el valor.
Si finalmente compras un vehículo a otra persona particular, recuerda que de todas formas puedes hacer el cambio de dominio del auto con la Transferencia Digital de Autofact, ahí te ahorras varias horas de trámite.
Dicho lo anterior y sabiendo que regatear es casi un arte, te dejamos a continuación los siguientes consejos para que te ahorres algo de plata…
Primero es bueno saber para qué quieres y necesitas un auto; luego asesorarte e investigar para saber qué modelos y marcas se ajustan a tus necesidades y presupuesto.
Hecho eso es recomendable que conozcas bien las virtudes y limitaciones del modelo que buscas; si es necesario pregúntale a algún conocido que haya tenido un modelo similar. La idea es que compres lo que más se adecúe a todo lo que necesitas de un vehículo.
Si ya sabes qué vehículo estás buscando, entonces cotiza y busca todas las alternativas que encuentres, te puede dar una idea de cómo está el mercado en el momento que estás buscando.
Al mismo tiempo, puedes revisar el Informe de Precios de Autofact que te va a dar otra referencia más acertada respecto de precios, versiones, modelos y años.
Es bueno saber si la marca de vehículo que buscas es famosa por desarrollar buenos bólidos, o bien es famosa por hacer porquerías con tuercas y ruedas.
Obviamente inclínate siempre por buenas marcas, normalmente las más tradicionales son las mejores y más confiables. Destacan Toyota, Nissan, Chevrolet, Fiat, Volkswagen, entre varios otros.
Si es una buena marca, confiable, pero no es una marca de lujo, ni menos una marca mala, entonces su depreciación debería ser más lenta y deberías poder venderlo en un futuro.
Imagina que estás muy entusiasmado con un auto usado, por ejemplo, un Nissan Kicks. Quizás ya sabes muchas cosas respecto de su prestigio, características y precios de mercado, no obstante, si te muestras muy ansioso no podrás regatear nada.
El dueño se dará cuenta y como es fácil vender un vehículo Nissan no accederá a tu oferta y esperará a venderlo al precio publicado.
Puede tener que ver con mantener la calma, pero es bueno mencionarlo como un punto aparte. Pues, si hablas mucho y comienzas a decir lo que quieres hacer y dónde irás con el auto que estás recién probando, entonces el vendedor captará tu motivación.
Habla lo justo y necesario y pregunta lo que haya que preguntar. Aunque te guste el auto, busca algún defecto visible y a veces es bueno decir: “Igual está un poco caro para como está…”
Después de revisar todo el auto, guardarte comentarios que puedan ir en tu contra y hacer una prueba de manejo, entonces llegó la hora de hacer la pregunta: “¿Cuál es el último precio?”
En este escenario hay varios posibles, tales como:
En los dos primeros casos, considera todo lo que te hemos dicho para que hagas una buena contraoferta y además:
En el último caso, si bien puede parecer obvio que una persona está dispuesta a bajarse de $7.300.000 a $7.000.000, de todas formas, evalúa lo que tendrías que invertir en mejoras del vehículo; quizás sería mejor ofrecer $6.500.000, por ejemplo.
A veces hay un vehículo que está bueno, pero requiere ciertas mantenciones, como cambio de homocinéticas, de aceite o de pastillas de freno, por ejemplo. Entonces, si una persona no está dispuesta a bajarse $300.000, pídele que te entregue el auto con dichas mantenciones hechas para que no tengas que hacer nada luego de haberlo comprado.
Solicita de manera gratuita información básica del vehículo AQUÍ