Enero - Julio 2022
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Conducir con niebla y neblina es una de las condiciones climáticas más complicadas y peligrosas, debido a que la visibilidad se ve altamente disminuida por la condensación de la humedad en el aire. Por ello, tomar precauciones si te encuentras en presencia de este fenómeno es vital.
Ahora, conducir con niebla es distinto a conducir con neblina. La única diferencia está en la variación de la falta de visibilidad que originan y en su densidad. La niebla es más densa que la neblina, por lo que complica más la visibilidad.
Así, la neblina puede reducir la visibilidad de 2 a 4 kilómetros, mientras que la niebla la puede reducir hasta menos de 1 kilómetro. Ante esto, y como veremos más adelante, un accidente de tránsito producido a causa de niebla y neblina en la carretera puede involucrar varios vehículos y tener consecuencias fatales.
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Ya con decirte que al conducir con niebla y neblina se reduce considerablemente la visibilidad, puedes deducir el peligro que significa enfrentarte a esta situación al volante. Y cuando la niebla es muy espesa, prácticamente elimina la visibilidad.
Sobre la visibilidad, en el “Libro del Nuevo Conductor” de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito (Conaset), se explica lo siguiente:
“Nuestra capacidad de calcular distancias depende de que veamos colores y contornos claros. En la oscuridad, estos se difuminan. Lo mismo sucede cuando la visibilidad se encuentra reducida por efecto de la niebla o la lluvia. En estas condiciones, el tráfico que viene en sentido contrario parece encontrarse más lejos de lo que realmente está. Esto puede hacer que usted aprecie mal las distancias cuando desee adelantar a otro vehículo”.
Con ello, la niebla y neblina dificultan la identificación de riesgos y el cálculo de las distancias, e incluso, puede crear ilusiones ópticas. Así también, los conductores pueden calcular mal su velocidad.
Otro de los peligros de conducir con niebla y neblina es que con la mezcla de la humedad y el vapor de los motores de los autos, el pavimento puede estar resbaladizo, reduciendo la adherencia de los neumáticos, lo que puede hacer que patines y que sea muy complicado frenar.
Es posible que todo chileno conozca el fenómeno de la camanchaca. Así es como se le llama a la niebla presente durante las mañanas en el norte del país, cerca del desierto de Atacama, y también en zonas desérticas del sur de Perú.
En general, la presencia de niebla y neblina en la carretera puede ocurrir alrededor de todo el país. Sin embargo, las carreteras de la zona central de Chile han protagonizado importantes accidentes a causa de la niebla presente en las mañanas de invierno, seguramente por el mayor tráfico de estos lugares.
En abril de 2018, de acuerdo con 24 Horas, se produjo un accidente a causa de la niebla en la ruta 5 Sur, a la altura de San Fernando. La colisión involucró a 21 vehículos y tuvo como resultado una víctima fatal y 54 lesionados.
Algo similar ocurrió en octubre de 2020, otra colisión múltiple. También en la Ruta 5 Sur, donde, de acuerdo con Mega Noticias, se vieron involucrados 15 autos, y resultaron 2 personas fallecidas y 4 heridas. Esto pasó cerca de Victoria, durante la mañana y con una densa niebla presente.
Estos accidentes también han ocurrido en Santiago. En agosto de 2022, cuando una densa niebla afectaba a la capital, un gran choque múltiple se produjo en la Ruta 78, conocida como Autopista del Sol. El Desconcierto informa que más de 15 autos y camiones chocaron en cadena, y 3 personas resultaron heridas.
Pero el caso más impactante es el accidente múltiple ocurrido en 2011. Según relata Cooperativa, en una mañana cubierta por una densa niebla en la Ruta 68, en el cruce de Algarrobo, 51 vehículos chocaron. El resultado fueron cinco muertos y 42 heridos sin riesgo vital.
Claramente, los hechos indican que esta zona es la que presenta más riesgo de accidentes producto de la niebla, por lo que si vas a circular por estas rutas en las mañanas del invierno, hazlo con la mayor de las precauciones.
Como ya te contamos, conducir con niebla y neblina en la carretera es una de las condiciones más peligrosas, por lo que si lo vas a hacer o si te toca en el camino, debes mantener la calma y seguir todas las precauciones que te recomendaremos.
Este será el consejo más importante y el que más prevendrá accidentes de tránsito. Una niebla muy densa puede hacer imposible ver lo que tienes enfrente, y en cualquier dirección de tu camino.
Como pudiste ver, los accidentes que se producen a causa de la niebla pueden tener resultados fatales y, generalmente, resultan en choques múltiples.
Y si ya estás conduciendo en zona de niebla, y la visibilidad era segura hasta que la niebla espesó repentinamente, lo que puede ocurrir, puedes salir del camino y estacionar. Así lo recomienda Mateo Castro, un experimentado camionero, para el medio Infobae, en el contexto de un reportaje sobre los accidentes producto de la niebla en Chile:
“Yo diría que es a lo que todos, los colegas choferes y conductores de camiones, más le temen. Bueno, además de los robos y los atentados, lo más difícil es encontrarse con niebla muy espesa. En ese caso, yo, personalmente yo, prefiero echarme al lado no más”.
Así también, evita conducir de noche. Pero en el caso de que realmente no veas nada, debes hacer lo siguiente:
Si ya sabes que habrá presencia de niebla en la zona en la que conducirás, prefiere no salir. Y si conducirás en una zona desconocida, revisa las condiciones climáticas, conducir con niebla en una ruta que no te sabes puede resultar todavía más peligroso, ya que te puedes ver completamente desorientado.
Debes ir con tus sentidos completamente puestos en el camino, nada de distracciones, en un microsegundo puedes terminar involucrado en un choque múltiple.
Si la niebla es muy densa, conduce apegado a la línea blanca que divide las dos calzadas, para que puedas guiarte mejor.
Otra cosa que te puede ayudar mucho es que conduzcas sin música o la radio encendida, ya que debes estar alerta ante cualquier imprevisto. Y si la visibilidad es baja, vas a tener que poner el oído a averiguar si se acercan autos o personas. Debes prestar atención al ruido de los motores y bocinazos, tanto como a las luces de los demás vehículos.
Una conducción a la defensiva te puede salvar la vida, esto significa, de acuerdo con “El Libro del Nuevo Conductor”:
Tu vehículo debe estar en buen estado en todo momento, es cierto, sin embargo, ante condiciones climáticas como la niebla, es especialmente necesario.
Como ya sabrás, de manera periódica debes realizar mantenimientos preventivos a tu auto. Si vas a conducir con niebla, debes tener tus luces en buen estado, ya que estas serán tus mejores compañeras en esta situación, junto con los frenos, que también deben estar en un estado óptimo para su buen uso.
Otra parte elemental es el limpiaparabrisas, procura que las plumillas estén en buen estado para que puedas hacer buen uso de estas y mejorar tu visibilidad. A su vez, el sistema de calefacción será de gran ayuda, y por ello, no debe estar averiada.
Así también, los neumáticos no pueden bajo ningún motivo estar desgastados, puesto que la adherencia se verá reducida por la humedad, y es vital que estén en un estado óptimo.
Si no mantienes tu auto en buen estado, imagina que se avería en plena carretera cubierta de niebla y tienes que detenerte o realizar una maniobra peligrosa.
Ahora, en el caso de que esto ocurra, o que tengas una emergencia personal o de salud, y debas detenerte, tienes que seguir las siguientes precauciones:
Es muy importante que tu velocidad sea muy baja, que tengas una distancia segura para frenar y reaccionar ante cualquier imprevisto. Ante la baja visibilidad que produce la niebla, este mayor tiempo de reacción te puede salvar la vida.
De igual forma, si reduces la velocidad, podrás mejorar la adherencia y prevenir los deslizamientos a causa de la humedad del pavimento.
Por ello, es recomendable que no adelantes mientras haya niebla, ya que esta maniobra te exige que aumentes la velocidad, lo que puede resultar muy peligroso.
Un buen consejo es que no te olvides de revisar el velocímetro cada cierto tiempo, pues la niebla puede crear la ilusión de una conducción lenta, haciendo que algunos conductores aumenten la velocidad.
Como ya te contamos, esto es muy importante. La distancia de seguridad entre vehículos debe permitirte frenar lento, a pisadas intermitentes. De lo contrario, si debes frenar bruscamente, puedes patinar.
Por esta razón es tan importante que tu velocidad sea reducida y tengas mucho espacio entre autos. En el escenario de niebla espesa, no debes realizar frenazos bruscos, porque esto te puede llevar a deslizar.
Lo ideal es que tu velocidad y distancia de los autos te permita frenar pisando apenas el pedal y de forma intermitente.
En el Libro del Nuevo Conductor se recomienda que, ante la presencia de niebla o neblina, “si su vehículo cuenta con focos neblineros delanteros, enciéndalos, simultáneamente con las luces bajas”.
Además, se recomienda que, de contar con estas luces neblineras, solo pueden usarse cuando la visibilidad se encuentre considerablemente reducida, tanto por niebla como por lluvia torrencial, y deben apagarse apenas mejore la visibilidad.
NO debes encender las luces altas, ya que estas se reflejan como espejo en las gotas de agua suspendidas en la neblina, dificultando aún más la visión.
Las luces bajas, al proyectarse directamente hacia el suelo, se ven más y mejor. Además, las luces de niebla traseras son de suma importancia para ser visto por los autos de atrás, pero se deben usar solo cuando la niebla es espesa, de lo contrario podrían deslumbrar.
Por último, no te olvides de tener tu auto asegurado y contar con todos sus papeles y documentos al día. Con ello, no te olvides nunca de portar tu kit de seguridad, con todos sus elementos obligatorios según la Ley de Tránsito. Si llegas a tener un accidente a causa de la niebla, esto te puede salvar la vida, y el bolsillo.
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